Ensalada templada de col
Las ensaladas templadas tienen algo especial: reconfortan sin pesar y huelen a cocina de hogar. Esta versión hecha con repollo, una variedad de col, es una forma diferente y deliciosa de disfrutar una verdura que solemos cocer más de la cuenta. Aquí la tratamos con más cariño: la escaldamos justo lo necesario para que quede tierna, ligera y aún con personalidad.
El aliño —un majado de ajo, comino, pimentón y aceite de oliva— hace el resto: sabores sencillos, profundos y llenos de matices. Además, cortar el repollo en tiras finas con un cuchillo bien afilado es clave: más precisión, más comodidad… y mucha más seguridad. Un pequeño detalle que marca la diferencia en el resultado final.
Duración: 15 minutos como mucho
Comensales: Según la cantidad de col que tengas 😉
Dificultad: Ninguna
Menaje utilizado: cazo o cacerola Vitrinor
Necesitas:
Ingredientes
• ½ repollo, por ejemplo
• 2 dientes de ajo
• ½ cucharadita de comino en grano
• 1 cucharadita de pimentón dulce o picante
• Sal al gusto
• 1 parte de vinagre bueno
• 3 partes de aceite de oliva virgen extra
¿Cómo se hace?
Cortar y hervir el repollo. Quita las hojas exteriores y corta el repollo en tiras finas con un cuchillo bien afilado; no solo es más cómodo: también es más seguro y ayuda a conseguir tiras regulares que se cocinan de forma uniforme.
Pon a hervir agua en una olla o cazo con abundante sal. Cuando rompa a hervir, escalda el repollo 3–4 minutos, no más. Debe quedar tierno pero crujiente; un punto perfecto para apreciar realmente su sabor. Escurre y reserva.
Prepara el majado. En un mortero, machaca los ajos con el comino y una pizca de sal. Añade el pimentón y el aceite de oliva virgen extra. Mezcla bien: el olor te irá diciendo que vas por buen camino.
Mezcla y sirve. Coloca el repollo en un bol, vierte el majado encima y mezcla. Sírvelo templado, cuando los aromas están más vivos y el repollo aún conserva ese punto de textura que lo hace tan especial.
Consejo
Puedes añadir semillas tostadas, frutos secos picados.
Este plato va perfecto con un buen arroz integral o una proteína a la plancha para una comida redonda y saludable.
Aquí tienes una receta sencilla, de temporada y con mucho carácter. Porque a veces basta tratar bien a un ingrediente humilde para descubrir todo lo que puede dar.