Es curiosa la forma en que algunos platos que hasta hace no tanto nos parecían exóticos, poco a poco se van introduciendo en nuestra mesa. Es el caso de las gyozas, un delicioso bocado nacido en China (allí se llama Dim Sum) que se disfruta en toda Asia y ahora en todas partes.
No es de extrañar el éxito de este entrante: admite un montón de variedades, es divertido de comer, ideal para compartir, se puede preparar y congelar para cuando queramos… elaborar la pasta y rellenarlas una a una es entretenido pero sencillo. Ya verás qué fácil es:
TIEMPO: 40 minutos, puede que algo más
DIFICULTAD: no es la receta más fácil que te hemos contado, pero tampoco te asustes
INGREDIENTES:
- 125 g de pollo picado
- 1 cucharadita de ajo machacado
- 2 cucharaditas de cebolleta picada
- 2 cucharaditas de col china picada
- 1 cucharadita de salsa de soja
- Aceite de oliva
- Sal
- 100 g de harina
- 50 ml de agua
- 1 cucharadita de aceite de sésamo
- Cebollino picado
PREPARACIÓN:
Para hacer la masa, comienza poniendo la harina en un bol, añade la sal y el agua hirviendo y mezcla bien para que no queden grumos. Ahora añade el aceite de sésamo y mezcla de nuevo, la masa debe parecer quebrada. Envuélvela en papel film y deja que repose media hora.
Cuando pase ese tiempo, desenvuelve y amasa hasta que se quede lisa y suave. Divide el trozo de masa en dos mitades y estira con ayuda de un rodillo hasta que se quede finita, de unos 2 mm de grosor. Este momento es emocionante; con un cortador redondo haz círculos con la masa, te deberían salir unos 15 más o menos.
Esta masa habrá que rellenarla con algo; en un mortero, machaca el ajo y la sal hasta conseguir una mezcla homogénea.
En una sartén con un chorro de aceite, saltea la pasta de ajo hasta que coja color y agrega la soja, mezcla de nuevo y retira del fuego.
Ahora saltea la col en la misma sartén y retira. Ojo, saltear no es pochar, debe quedar crujiente para no perder la gracia.
Terminemos de hacer el relleno, que ya estamos tardando. Mezcla en un bol la carne picada, la col, la cebolleta, el cebollino y la mezcla de ajo.
Y a rellenar: con mucha paciencia, coloca una cucharada del relleno sobre los círculos de masa y dobla formando las empanadillas. En este momento, si quisieras, podrías congelarlas y reservarlas para otra ocasión.
Si no puedes esperar para probarlas, calienta una sartén con un poco de aceite, agrega las gyozas y cocina hasta que se doren por debajo y queden crujientes. Añade entonces 1/3 de vaso de agua, tapa y cocina a fuego medio-bajo durante unos 8 minutos.
Sirve con un poco de cebollino picado y salsa de soja. Si los coges con palillos saben mejor, no sabemos por qué.
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