Te decimos la cocina, porque no hay nada como estirar la mano sin perder la vista la sartén y añadir al solomillo una rama fresca de tomillo, pero lo cierto es que en algunas cocinas no llega la luz solar. Sin problema, si tienes balcón será el sitio perfecto o cerca de una ventana donde tus plantas reciban la luz solar directa al menos 5 o 6 horas al día.
¡Cuánta alegría les dan a los platos las hierbas aromáticas! En algunos, de hecho, es uno de los ingredientes principales, como en el pesto. Pero en mayor o menos medida, siempre están presentes en nuestra cocina para darle un aroma muy especial a cada receta. No hay guiso sin laurel, salsa verde sin perejil, ni hummus sin comino.
¿Puedes comprarlas en el supermercado? Sí, pero no tendrán la misma fragancia. Y con lo sencillo y cómodo que es tenerlo en casa, merece la pena.
Comenzamos…
Elige el recipiente
Tienes muchas opciones… Puedes ir a lo sencillo, las típicas macetas pequeñas puestas unas cerca de otra, o cajas de madera alargadas donde todas las plantas compartan la misma tierra. Incluso puedes reciclar latas o envases de plástico individuales. Si tienes la suerte de disponer de mucho espacio puedes usar una pared para colgarlas como si fuera un jardín vertical. ¡Ya verás la vida que le da a tu cocina!
Elige la tierra
Si no quieres sorpresas, elige la mejor tierra que puedas permitirte, con materia orgánica que hará que tus plantas crezcan fuertes y sanas. Además, en los centros especializados encontrarás abonos orgánicos para huertos urbanos con todos los nutrientes que necesitará tu huerto.
Elige las semillas
Tienes muchísimas opciones. Nosotros te proponemos algunas plantas y la mejor forma de sacarles partido.
Albahaca
Se usa para dar sabor a ensaladas, a las pastas, pizzas… y, cómo no, para hacer pesto. Pero la puedes usas en sopas, aceites, salsas o caldos.
Menta
La puedes emplear en guisos de garbanzos, alubias, guisantes, estofados, pastas y, sin duda, te será muy útil para hacer aromáticos postres.
Orégano
¡Qué sería de una boloñesa sin orégano! Y, además, le dará un toque especial a pescados, patatas, panes, verduras, quesos y legumbres.
Perejil
El rey de la cocina española. Junto con el ajo, hacen un tándem que enriquece todo lo que toca. Imprescindible en el pilpil, las patatas alioli o para hacer una salsa verde.
Romero
Esta hierba da muy buenos resultados en las recetas de carnes asadas y guisadas, en pescados y en arroces. Incluso podrás aromatizar aceites y vinagres.
Cilantro
Ceviche, guacamole y muchos platos importados llevan como hierba principal el cilantro. Pero también sirve para aromatizar ensaladas, salsas, escabeches, adobos…
Tomillo
Una hierba habitual en la cocina mediterránea de intenso olor y sabor que da lo mejor de sí misma en estofados, escabeches, parrillas, aliños, marinados…
Salvia
Es muy usada en la cocina italiana y francesa y es un gran condimento para la carne de cerdo, para aromatizar verduras o para añadir a la pasta o cremas vegetales.