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Cocina

lunes, 28 de julio de 2025

Huevos rellenos de salmón ahumado

Una receta elegante y nutritiva para el verano, en menos tiempo del que tardas en pedir comida a domicilio


Si buscas una receta fácil, vistosa y con ese puntito gourmet que te hace quedar como un chef sin despeinarte, apunta estos huevos rellenos. El salmón ahumado aporta sabor, proteínas de calidad y grasas saludables, mientras que el queso crema les da una textura irresistible. Y son tan rápidos de preparar que te dejarán mucho tiempo libre para seguir disfrutando del verano. Perfectos como entrante, brunch, cena ligera o para un picoteo con amigos.

Comensales: de 3 a 6

Tiempo de preparación: 15 minutos

Dificultad: ¿Sabes cocer un huevo? Pues ya lo tienes.

Menaje utilizado: Cazo de la gama City de Vitrinor

Ingredientes:

  • 3 huevos
  • 60 g de salmón ahumado
  • 60 g de queso crema
  • Eneldo seco (al gusto)
  • Sal (también al gusto, pero sin pasarte, que el salmón ya viene potente)

 

Preparación

Los huevos, lo primero

Pon a hervir agua en tu cazo Vitrinor, el de confianza. Cocina los huevos durante 10 minutos. Cuando estén listos, pásalos por agua muy fría para pelarlos sin problema. Pártelos por la mitad (a lo largo, para que quepa mejor el relleno).

El relleno

Con cuidado, saca las yemas cocidas y échalas en un bol. Añade el queso crema, una pizca de sal y la mitad del salmón muy, muy picado. Si utilizas la tabla de corte Vitrinor, te resultará muy cómodo. Mezcla todo hasta lograr una crema fina que casi se unta sola.

El montaje

Con una cucharilla o una manga pastelera, o una manga pastelera si tienes, rellena las mitades de huevo con la mezcla.

El toque final

Corta el salmón que queda en tiras finas y enróllalas como si fuesen florecitas. Coloca una sobre cada huevo y espolvorea un poquito de eneldo seco por encima. Y listo: ni la Real Academia de la Tapa lo haría mejor.

¿Algo más?

Puedes darle tu toque: cambia el eneldo por cebollino, añade un poco de limón o pon unas huevas encima para más glamour. Incluso puedes convertirlo en un brunch de domingo con una tosta debajo y una copita de cava al lado.

Fáciles, rápidos y con un aire chic que engancha. ¿Te animas a probarlos?