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Cocina

miércoles, 28 de agosto de 2024

Café perfetto con tu cafetera italiana

Pocos objetos cotidianos son tan inconfundibles como la silueta octogonal de la cafetera Moka, también conocida como “italiana”. Presente en millones de hogares de todo el mundo desde su invención en los años 30, nos encanta su aire vintage y su facilidad de uso. Si seguimos algunos consejos, nos brindará un café perfetto.


El siseo que provoca el café surgiendo en la cafetera, acompañado de un delicioso aroma, nos ha ayudado a empezar el día desde que podemos recordar. La protagonista no es otra que la cafetera italiana, un objeto de los de toda la vida que sigue siendo una de las formas más sencillas y recomendables de hacer un buen café sin complicarnos la vida.

En Vitrinor podrás encontrar diferentes modelos de este simpático complemento, tanto para inducción como para vitrocerámica.

Todo lo bueno se puede mejorar. Y si quieres que tu cafetera italiana te proporcione un café “perfetto” te sugerimos estos consejos que pueden marcar la diferencia:

  • Elige un buen café. Obvio ¿no? Cuanto mejor sea la materia prima, mejor resultado final. Estamos muy acostumbrados a los sabores torrefactos, pero si queremos apreciar matices disfrutaremos más con un café de tueste natural. Aunque va en gustos.
  • Recién molido, mejor. El molinillo de café es una herramienta básica para los más cafeteros. La diferencia entre un café recién molido y otras opciones se nota mucho. El café es un producto delicado muy sensible al contacto con el aire, olores y variaciones de temperatura. A la hora de moler elige un grano medio, ni mucho ni poco.
  • Agua caliente y mineral. Llena el depósito con agua caliente y, dependiendo de la zona en que vivas, considera utilizar agua mineral para evitar la cal. La razón para que añadas el agua ya caliente es que así evitas que el café molido se reseque mientras la cafetera se calienta al fuego.
  • Cierra bien. Ni muy fuerte ni muy flojo. Asegúrate de que la goma está en buen estado y sujeta la cafetera por el cuerpo y no por el asa a la hora de apretar.
  • La tapa abierta. Coloca la cafetera en un fuego medio-bajo adecuado al diámetro del recipiente. Los puristas recomiendan dejar la tapa abierta: controlamos el proceso en todo momento y el café sale más equilibrado.
  • ¡No dejes que hierva! Cuando ya veas que al café sale en todo su caudal, cierra la tapa, retira del fuego y deja que acabe de salir con su calor residual. Si dejas que hierva te lo cargas.
  • Sirve inmediatamente. Un café recalentado es un quiero y no puedo, una pena. Hay cafeteras de diferentes tamaños; no necesitas hacer café de más y con la cafetera italiana lo prepararás en unos minutos, merece la pena.

Aunque si te sobra café, también podrás emplearlo para elaborar postres tan deliciosos como este tiramisú incluido en nuestra sección de recetas.

Esperamos que este artículo te ayude a dar más sabor a tus desayunos y sobremesas.